Desde siempre comprendió que le gustaba la moda y sobre todo que quería trabajar fotografiando a personas. Encontró en el retrato y la fotografía de moda, el soporte coherente para proyectar sus ilusiones, sus nociones estéticas y sus puntos de vista. “…Busco herramientas, investigo y trabajo en una dirección clara, la de querer sacar lo mejor y lo más importante de cada persona…” Así desarrolló un universo claramente centrado en la mujer y en la sensualidad femenina. En la actualidad gestiona su estudio, colabora para distintos medios y desarrolla proyectos personales. Emprendedora, se diversifica fuera del mundo de la fotografía, junto a Laura Put y Alba Plaza, en la ya mítica fiesta barcelonesa “Super Vixens” y sus súper sensuales luchadoras en barro.
¿Detectas alguna tendencia en fotografía de moda en Barcelona? En fotografía de moda no busco tendencias dejo correr mi instinto pero si reconozco una cierta necesidad personal, y de muchos otros fotógrafos que me rodean, de volver al carrete, hacer un trabajo menos digital, más humano, más real, comienza a existir una necesidad de investigar más en esta dirección.
¿Recuerdas alguna anécdota que vincules a tu profesión? Terminando el bachillerato hice mi primer curso de fotografía, para practicar comencé fotografiando a algunas amigas y cuando me quise dar cuenta, le había hecho un book a toda la clase.
¿Cómo fotógrafa cuál rasgo de Barcelona rescatas? Barcelona es una ciudad estimulante, su luz te inspira, te invita a sacar fotos…” |